josefina
Después de una larga ausencia estoy aquí de nuevo y quiero me acompañen a realizar esta oración que leí en un periódico local, me llego al corazón y deseo compartirla con ustedes:
Señor, desacelera los latidos de mi corazón, calmando mi mente. Disminuye mi ritmo apresurado con una visión de la eternidad del tiempo. En medio de las confusiones del dia a dia, dame la tranquilidad de las montañas. Retira la tension de mis músculos y nervios con la música tranquilizante de los rios de aguas constantes que viven en mis recuerdos. Ayudame a conocer el poder magico y reparador del sueño. Enseñame el arte de tomar pequeños descansos: reducir mi ritmo para contemplar una flor, charlar con un amigo, acariciar a un niño, leer un poema, oir una música preferida. Calma mi paso, Señor, para que yo pueda percibir en medio de la incesante labor cotidiana de los ruidos, luchas, alegrias,cansancio o desalientos Tu presencia constante en mi corazón. Calma mi paso, Señor, para que yo pueda entonar el cántico de la esperanza, sonreír para mi prójimo y callarme para escuchar Tu voz. Calma mi paso, Señor, e inspirame a enterrar mis raíces en el suelo de los valores duraderos de la vida, para que yo pueda crecer hasta las estrellas de mi destino mayor. Gracias, Señor, por el día de hoy, por la familia que me diste, mi trabajo y sobretodo, por Tu presencia en mi vida.
Gracias por estar ahí para mi.

1 Response
  1. menchu Says:

    Acabo de conocer tu blog y me gusta mucho esta oración, creo que a todas nos viene muy bien, con esta vida tan ajetreada que tenemos, nos recuerda que hay que parar un poco y recrearnos en las pequeñas cosas que nos hacen feliz y que a veces no tenemos tiempo de disfrutar, gracias por compartirla. Besitos: Menchu